¿Alguna vez ha pensado que en los ambientes en los que vivimos pueden habitar esos seres emparentados con las arañas, que son las garrapatas? No se sorprenda, pues en efecto, las garrapatas también pueden estar en el interior de nuestra vivienda, si tenemos mascotas. En ellas, generalmente, es donde se alberga una de las garrapatas más comunes que es la llamada marrón.
Para empezar debe usted saber que las garrapatas son los ácaros de mayor tamaño, miden entre 3 y 8 milímetros, aunque las hembras alimentadas miden inclusos un centímetro. Tienen cuatro pares de patas y son parásitos hematófagos. ¿Qué significa esto? Que se alimentan propiamente de la sangre ya sea animal o humana. Lo hacen gracias a los dientes en hilera que tienen y al contacto directo con la piel; una vez que este contacto se da la garrapata succiona la sangre y lo más grave es que introduce virus o bacterias. Pueden estar prendidas a la piel. En ocasiones es posible que la picadura pase inadvertida debido a que los componentes de la saliva de la garrapata son anestésicos.
No sólo en los ambientes urbanos se encuentran las garrapatas, también en el campo, por ello es frecuente que el ganado o las aves sean atacado por esta plaga. Es sobre todo en primavera y verano cuando hay una proliferación de éstas.
Debemos estar muy atentos a mantener nuestros espacios libres de garrapatas, pues transmiten virus como el de la encefalitis. También pueden causar tifus y la enfermedad de Lyme.
Hay considerar que hay garrapatas blandas y duras. Las primeras permanecen únicamente en el hospedador el tiempo necesario para cubrir sus necesidades; en cambio suelen quedarse en el hospedador succionando sangre hasta que llega su metamorfosis, es decir cambian de un estado a otro. Hablamos de metamorfosis porque el ciclo de las garrapatas se compone de 4 fases: huevos, larvas, ninfas y adultos.
Es de vital importancia recurrir a la fumigación de patios, jardines e interiores. Además, considere que no basta un espacio limpio. En ocasiones incluso hay que repetir la fumigación. Recuerde que sólo el 5% de garrapatas se encuentra en animales, el 95 %, en el ambiente. Diga no a las garrapatas y sí a la fumigación.